La cirugía de la nariz

Diseñada para mejorar el aspecto de su nariz, que puede presentar distintos defectos, congénitos o adquiridos. Puede requerir cambios globales o localizados, tanto estéticos como funcionales, de acuerdo a cada caso.

El éxito de una operación radica, en buena parte, del resultado de una buena comunicación entre médico y el paciente. La confianza, basada en expectativas realistas y una técnica basada en el saber y la experiencia, va creciendo durante la consulta previa a la cirugía.

Planificación previa

Ademas de los examenes de rutina, se le pueden pedir estudios complementarios por imágenes o interconsultas – alergista, otorrinolaringólogo-. Luego de una completa evaluación y estudio, Ud. recibirá información sobre los tipos de anestesia, el lugar de la intervención y los costos de la misma. Por lo general, propongo la anestesia general, para tener completo y seguro manejo de la vía aérea. Siempre en ámbito sanatorial, con internacion de algunas horas post quirúrgicas.

La operación

La palabra rinoplastia significa dar forma a la nariz. Bajo anestesia, se hace un abordaje oculto que permiten despegar la piel de la nariz de su esqueleto de hueso y cartílago. Estas incisiones se hacen por dentro de la nariz de manera que sean totalmente invisibles, salvo en algunos casos especiales, en que se planifica agregar alguna incisión. Luego, se modifica la forma resecando o cambiando la forma del hueso y del cartílago. La piel se reacomoda sobre las nuevas estructuras, y se suturan las incisiones.

Finalmente, se coloca una férula externa para mantener la nueva forma, y a veces se colocan en los orificios nasales tapones, de un material suave y absorbente, para evitar la acumulación de coágulos y estabilizar el tabique nasal.

El Postoperatorio

Inmediatamente después de la cirugía, Ud. tendrá una férula pequeña sobre su nariz con el fin de protegerla y mantenerla estable por 5 a 7 días. Los tapones, de haber sido necesario colocarlos, los retira el cirujano entre las 6hs y los 4 días después de la intervención. Siempre se deja durante el primer día postoperatorio un ¨bigote¨ de gasa bajo los orificios nasales –sobre el labio superior- para absorber la salida de gotas de sangre hacia el exterior, y se recambia cada vez que se manche groseramente.

Es importante que Ud. mantenga la cabeza elevada con almohadas al principio. Se aconseja también frío local, a nivel de los parpados y  mejillas. Ud. sentirá sus parpados hinchados especialmente durante los dos primeros días, cediendo hacia el fin de la primera semana. Debe tomar analgésicos antinflamatorios dos o tres días. La férula de yeso generalmente se retira a los 6 o 7 días de la operación, pudiendo entonces limpiar la piel subyacente con agua y jabón neutro, las cremas desmaquillantes ayudan a retirar el exceso de grasitud. 

Algunas actividades no son convenientes durante las primeras semanas, como la exposición directa al sol, el exceso de ejercicio, y las situaciones que puedan ocasionar un trauma en la nariz, como la competición deportiva grupal. El apoyo de los anteojos no debe pesar sobre la zona.

El resultado estético estable y definido se establece al año de operado, sin embargo a los 30 días el aspecto de la nariz ya es agradable.